jueves, 25 de enero de 2018

RUTA LORQUIANA POR GRANADA CON 2º BACH A y D


 Ruta de Lorca.
(Elena Jiménez Sánchez,  2ºBach A)


Querido Federico:

Cada minuto te tenemos presente,
y no es que murieras por ser un delincuente,
eso es algo que ya todo el mundo debería tener en mente.
Fue en tu Granada el crimen cometido,
ciudad de la que siempre estuviste orgulloso,
como buen granadino.


El día 16 de enero, fuimos el alumnado de 2ºBach a tu ruta,
“La Ruta de Lorca”,
¿el motivo?, queríamos saber más sobre tu historia.
Antes de visitar tu casa natal, en Fuente Vaqueros, fuimos primero a tu museo;
y éramos muchos, por lo que antes de entrar nos dividieron en dos grupos.
Una vez dentro de la pequeña sala, nos enseñaron un gran número de cartas
enviadas desde diferentes partes del mundo, todos con el mismo destinatario: tú.
Allí comentaron uno de tus poemas, “Navidad en el Hudson”, preciosa pieza, recogido en tu  libro Poeta en Nueva York, y escrito durante tu estancia en la Universidad de Columbia, la mejor.
Después de aquello fuimos a tu casa, y estaba en muy buen estado,
gracias a tu hermana.
Nos contaron un poco el principio de tu historia,
y que escribías sobre la muerte casi a todas horas.
Dimos entonces una vuelta por todas las habitaciones, y nos hablaron de tus padres, de tus hermanos,
e incluso de algunos de tus amores.


Después de la casa en donde naciste, nos tocó visitar la casa en la cual te criaste,
en Valderrubio,
aunque primero vimos un vídeo, por cierto, con bastante misterio de por medio.
En él salías tú, digamos, hablando con tu yo pequeño.
En la casa dimos otro rodeo, y apareciste en otro vídeo, causando terror a algunos,
ya que estaba muy bien hecho.
En una libreta que había te dejamos algunas dedicatorias,
y por muy pequeñas que fueran transmitían un gran mensaje;
un mensaje que todas esas personas tendrán en el corazón de ahora en adelante,
siendo éste el de no olvidarte.


Subimos a continuación las escaleras que dirigían a la azotea,
y allí, donde nos dijeron que era el lugar donde se cultivaba el trigo,
había un montón de cuadros de tus amigos,
y conocidos, también poetas,
que te escribían, y tú a ellos en su momento, con diferentes ideas.
Y ellos son, entre otros y contigo,
los que en su día quedaron para siempre
como la increíble Generación del 27.


Para comer pasamos por Alfácar, y es verdad, no había ni un solo bar.
Todo estaba cerrado a esa hora,
y algunos de nosotros  nos hubiéramos tenido que aguantar
si no fuera por un hombre
que nos llevó hasta un restaurante con tu nombre.



El viaje en autobús fue bastante bueno,
ya que varios de tus poemas fueron recitados mientras tanto
por algunos de nuestros compañeros.



Como última parada llegamos al lugar donde tu vida desgraciadamente acabó,
cerca del barranco de Víznar deberías estar, pero sobre eso hay muchas historias detrás;
o incluso al lado de un olivo, pero realmente, ¿dónde estás, Federico?
Ya allí, pasando por tu parque, el poema de Machado resonó por todas partes;
y es verdad, fue en tu Granada,
donde todo empezó, pero donde realmente nada acaba.
Pues siempre estarás en nuestra memoria, ¿sabes?
y sí, ya sabemos tu historia,
pero nunca conoceremos en realidad
el verdadero misterio que había tras Federico García Lorca.




// Los profesores Rafael Cledera y Ángel Ávila posan junto a Ariana Manzanares, la alumna del Máster que hace sus Prácticas en el IES Salvador Rueda //


1 comentario:

  1. Esta actividad estuvo muy bien organizada, bastante interesante y educativa.
    Sí que es verdad que me hubiera gustado ver un poco más de la visita al barranco ya que estuvimos poco rato. Aun así recomiendo la visita 9/10. Un saludo.
    Comentario 2º BACH A

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